Una vez que ha concluido el plazo para la presentación de solicitudes de la PAC nos hemos sentado para hacer balance.
Como otros años, los municipios con convergencia nos han dado mucho trabajo. Y mucho más si tenemos en cuenta que estamos empeñados (!?!) en que todos nuestros clientes se sientan cómodos y no tengan prisa. Mi compañero Miguel está convencido de que dedicar un poco de tiempo puede ahorrar mucho dinero y nuestros clientes saben que merece la pena el tiempo que pasan sentados con él.
Esto es algo que hemos aprendido en todos los años que llevamos tramitando subvenciones (ahora con la PAC y antes con la ayuda a la producción) y cuando nos llegan clientes que las han gestionado en otras entidades a veces se descuida esto. De hecho, a veces han perdido bastante dinero.
Nuestro sistema de cita previa ha funcionado muy bien y hemos podido confeccionar las solicitudes con tiempo suficiente. Desafortunadamente, no hemos podido evitar que se produzcan algunos retrasos aunque la paciencia de nuestros clientes ha sido incomparable, como siempre.
El trabajo con las entidades colaboradoras ha estado a un gran nivel, también como era de esperar, y la ampliación del plazo de presentación de solicitudes (a última hora, como siempre) nos ha permitido gestionar el envío de las remesas de una forma fluida y eficiente.
Al final, el aumento de plazo nos ha dado un poco de tranquilidad, porque para el 30 de abril ya estaba terminado todo el grueso del trabajo.
En el lado negativo, como casi siempre, hay que colocar la aplicación de captura, que ha dado problemas hasta la penúltima versión. Primero se generó un problema con el cambio de código del término municipal de Jaén, que impedía la recuperación de las parcelas del SIGPAC; posteriormente, la verificación de las solicitudes al imprimir emitía mensajes de error; finalmente, aparecían en blanco algunos listados de comprobación. Una aplicación que genera ocho actualizaciones en poco más de dos meses puede resultar un gran inconveniente para el trabajo. Y no nos olvidemos que el plazo de presentación de las solicitudes comienza el 1 de febrero y el programa está disponible, como todos los años, la última semana de febrero...
La gran conclusión de estos tres meses de lucha con las parcelas, el SIGPAC y la burocracia es que hay mucha gente que necesita información precisa y objetiva sobre sus derechos y no todo el mundo está capacitado para proporcionarla. Seguiremos nuestro trabajo en apoyo de los solicitantes y agradecemos cualquier comentario o sugerencia que pueda mejorarlo.
Como otros años, los municipios con convergencia nos han dado mucho trabajo. Y mucho más si tenemos en cuenta que estamos empeñados (!?!) en que todos nuestros clientes se sientan cómodos y no tengan prisa. Mi compañero Miguel está convencido de que dedicar un poco de tiempo puede ahorrar mucho dinero y nuestros clientes saben que merece la pena el tiempo que pasan sentados con él.
Esto es algo que hemos aprendido en todos los años que llevamos tramitando subvenciones (ahora con la PAC y antes con la ayuda a la producción) y cuando nos llegan clientes que las han gestionado en otras entidades a veces se descuida esto. De hecho, a veces han perdido bastante dinero.
Nuestro sistema de cita previa ha funcionado muy bien y hemos podido confeccionar las solicitudes con tiempo suficiente. Desafortunadamente, no hemos podido evitar que se produzcan algunos retrasos aunque la paciencia de nuestros clientes ha sido incomparable, como siempre.
El trabajo con las entidades colaboradoras ha estado a un gran nivel, también como era de esperar, y la ampliación del plazo de presentación de solicitudes (a última hora, como siempre) nos ha permitido gestionar el envío de las remesas de una forma fluida y eficiente.
Al final, el aumento de plazo nos ha dado un poco de tranquilidad, porque para el 30 de abril ya estaba terminado todo el grueso del trabajo.
En el lado negativo, como casi siempre, hay que colocar la aplicación de captura, que ha dado problemas hasta la penúltima versión. Primero se generó un problema con el cambio de código del término municipal de Jaén, que impedía la recuperación de las parcelas del SIGPAC; posteriormente, la verificación de las solicitudes al imprimir emitía mensajes de error; finalmente, aparecían en blanco algunos listados de comprobación. Una aplicación que genera ocho actualizaciones en poco más de dos meses puede resultar un gran inconveniente para el trabajo. Y no nos olvidemos que el plazo de presentación de las solicitudes comienza el 1 de febrero y el programa está disponible, como todos los años, la última semana de febrero...
La gran conclusión de estos tres meses de lucha con las parcelas, el SIGPAC y la burocracia es que hay mucha gente que necesita información precisa y objetiva sobre sus derechos y no todo el mundo está capacitado para proporcionarla. Seguiremos nuestro trabajo en apoyo de los solicitantes y agradecemos cualquier comentario o sugerencia que pueda mejorarlo.
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